martes, 11 de agosto de 2015

CURACIÓN POR EL ESPIRITU SANTO

GNOSIS
CURACIÓN POR EL ESPÍRITU SANTO
Por: samael aun weor

La Divina Madre Kundalini es el parte central de toda sadhana.

Cuando uno está haciendo estas prácticas, está en perfecta concentración, en oración, suplicándole, rogándole a la Divina Madre por LA NECESIDAD MÁS APREMIANTE.

Por medio de Ella (La Divina Madre Kundalini), puede uno pedir al Logos; Ella intercede ante el Logos, pide con uno, suplica para uno. Ella tiene gran poder.

Uno le suplica a Ella, a la Divina Madre, que interceda por uno ante el Tercer Logos (Espíritu Santo) y que le suplique al Logos la curación, el despertar de la conciencia, el despertar de tal o cual chakra, etc.

En estas prácticas de meditación, concentración y súplicas bien puede uno pedirle a su Divina Madre Kundalini que Ella, por su propia cuenta, invoque a su Divino Esposo, al Divino Tercer Logos, Sacratísimo Espíritu Santo. Bien sabemos que el Esposo de la Madre Divina es el Espíritu Santo.

Hay que rogarle, suplicarle intensamente a la Madre Divina, para que Ella suplique y ruegue a su Divino Esposo que nos cure, nos aliente de cualquier enfermedad o dolencia que nos aqueje.

Entonces Ella se concentrará en el Logos, su Esposo, el Archi Hierofante o Archimago, como se le llama, para que venga y sane tal o cual órgano enfermo que nos impida dar rendimiento.

En esos momentos debe uno identificarse con el Logos, con el Espíritu Santo y en forma tremenda, imperiosa, ordenarle al órgano que está enfermo, diciéndole:

¡SANA! ¡SANA! ¡SANA!
¡TRABAJA! ¡TRABAJA! ¡TRABAJA!

Hay que hablarle a ese órgano con fe verdadera, con energía, con valor, pues tiene que sanar forzosamente.

Hay que concentrarse decididamente en cada célula del órgano enfermo, en cada molécula, en cada átomo, en cada electrón del órgano enfermo, ordenándole que trabaje, ¡que se sane!, ¡que se cure! y profundamente concentrado en el Logos, plenamente identificado con el Espíritu Santo, que en esos momentos está haciendo la curación, sanando el órgano enfermo.

Así ese órgano tendrá que sanar, tendrá que curarse, eso es obvio.

Así pues, es aconsejable que cada quien aprenda a curarse por sí mismo.

Mediante la fuerza del Espíritu Santo uno puede llegar a curarse a sí mismo, a sanarse de cualquier enfermedad.

Debe concentrarse en su Divina Madre Kundalini, pedirle que llame al Espíritu Santo y que le ruegue la curación del órgano enfermo, que le suplique al Logos que lo sane.

Además, y esto es muy importante, hay que abrir ese órgano enfermo, diciéndole: ¡ÁBRETE SÉSAMO!

Se repetirá lo menos 3 veces este poderoso mantram que figura en Las Mil y Una Noches.

La gente siempre ha creído que sólo es un cuento agradable aquel en el que aparece el mantram y no le ha prestado mucha atención, pero ¡Abrete sésamo! es un verdadero mantram.

¡Ábrete sésamo! y se le ordena al órgano enfermo que reciba la fuerza curativa vital, entonces penetra la fuerza del Espíritu Santo dentro del órgano y es claro que se sana, se cura con la fuerza del Tercer Logos; pero hay que hacerlo con muchísima fe y fe y fe.

Hay que abrir el órgano enfermo con la imaginación, ordenándole imperiosamente: ¡Ábrete sésamo! ¡Ábrete sésamo! ¡Ábrete sésamo!
samael aun weor